Otros · 08 de Feb 2019
El caos (interno y externo) puede quitarnos tiempo y energía.
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A pesar del dicho “más vale que sobre a que falte” con el que muchos de nosotros hemos crecido, hoy las personas se están dando cuenta de que, por el contrario, tener muchas cosas quita tiempo, energía y genera estrés.
Hasta hace unos años se pensaba que el minimalismo era un estilo de decoración, pero en realidad es una filosofía de vida que consiste en darle prioridad a lo esencial y dejar ir lo superficial.
Pero aquí viene lo importante, porque para cada persona “lo esencial” será algo diferente. Para alguien que estudia ilustración puede ser importante tener colores y muchos tipos de lápices, mientras que alguien que viaja mucho preferirá tener mapas, una gran mochila y zapatos para escalar.
Todos tenemos diferentes intereses. La idea es que en base a ellos tomemos consciencia de qué es importante en este momento y podamos liberarnos de lo demás. Esto no solo aplica a cosas materiales sino también a actividades, aplicaciones del celular y hasta nuestros pensamientos.
¿Cuántos pantalones tienes acumulados en el closet porque sientes en algún momento te quedarán? ¿Realmente usas todo lo que tienes en tu celular? ¿Sigues conservando amigos que no aportan nada a tu vida pero que no dejas ir por flojera? Hazte esas preguntas para comenzar.
Estos son algunos beneficios de incorporar al minimalismo a tu vida:
Los espacios ordenados dan calma y menos ruido a la mente.
Todas esas pequeñas decisiones que tienes que tomar cada día como qué ropa te pondrás o dónde hay un lapicero para llevar a la universidad (si logras encontrarlo en el cajón donde guardas de todo un poco), te van quitando energía que podrías usar para cosas más importantes.
Al consumir menos, gastarás menos recursos. Y si además usas productos de limpieza natural o cosmética ecológica el impacto será mayor.
Tener un espacio de trabajo despejado, con solo lo necesario, te ayudará a distraerte menos.
Aunque no es la finalidad del minimalismo, es una consecuencia. Al comprar menos, con menor frecuencia y solo cosas de calidad (que te durarán porque las cuidarás más), es lógico que tu economía comience a mejorar.
¿Podrías vivir con menos? ¿Qué es lo primero que sacarías de tu vida?