Identidad · 13 de Mayo 2019
La asociación conformada por 25 artesanos ha sumado un nuevo reconocimiento a la larga lista de premios que tiene en su trayectoria.
Ministerio de Cultura
El Ministerio de Cultura conmemoró a una nueva “Personalidad Meritoria de la Cultura”: La asociación de Grandes Maestros Artesanos región Cusco. Ellos fueron premiados por su gran contribución a la preservación del arte tradicional de la región a través de sus conocimientos, técnicas e iconografía. Esta asociación ha sido condecorada anteriormente por distintas instituciones públicas a nivel provincial, regional y nacional.
Entre estos reconocimientos se encuentra el Premio de Excelencia UNESCO para la Artesanía (2014), que lo ostentan Hilda Valeriana Cachi Yupanqui en el rubro de platería y Ruth Pimentel Quispe en textilería de telar de cintura. Otro gran premio que recibió esta asociación es el de Gran Premio Nacional Amautas de la Artesanía conferido por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo a los maestros Abraham Fausto Aller Escalante en la línea de imaginería, Juana María Mendívil Dueñas en imaginería religiosa, y Mariano Vicitación Sullca Huamán en platería y joyería. Además, en el 2017 la asociación recibió el Reconocimiento en Mérito a la Trayectoria como Asociación por la Municipalidad Provincial de Cusco; y en el 2018, el Diploma de Reconocimiento otorgado por la Comisión de Cultura y Patrimonio Cultural del Congreso de la República, el Reconocimiento por el Gobierno Regional de Cusco la Medalla de Alcaldía por la Municipalidad Provincial de Cusco.
La asociación está conformada por 25 artesanos en total, la mayoría tiene más de 40 años de trayectoria. Su ardua labor ha colaborado al desarrollo sostenible de la región Cusco.
Entre los rubros en los que trabajan, se encuentra la joyería y platería en técnicas de vaciado, laminado, repujado y cincelado en alto y bajo relieve. Por otro lado, también dominan el arte textil con el uso de telar de cintura, fibras de camélidos americanos y tintes naturales para plasmar diseños iconográficos prehispánicos, costumbristas y florales. Además, mantienen la tradición de los cuadros de la escuela cusqueña, con la técnica de pintura al óleo sobre madera, lienzo o incluso cobre; la escultura está presente con el modelado en arcilla, la cerámica escultórica. Finalmente, se mantiene la tradicional elaboración de los Niños Manuelitos, piezas religiosas con acabados en pan de oro, bronce y plata; el tallado en madera y realización en cuero, entre otros.