Ecología · 17 de Feb 2020
¿Sabes que en el mes de febrero Lima metropolitana y Callao consume 120 millones de litros de agua? En esta nota te contamos porqué.
Andina/Canal Ipe
Febrero es el mes en el que más desperdiciamos agua. Y no por razones de higiene personal o limpieza en general. Lamentablemente lo hacemos en situaciones que no contribuyen al cuidado de este recurso. Por ejemplo, en el popular “juego” de lanzar globos o baldes de agua, costumbre bandera de la época de carnavales.
Aunque para algunos sea divertido jugar con este recurso, debemos saber que estamos actuando mal. Y es que, lamentablemente el agua no es un recurso ilimitado.
A Lima Metropolitana y Callao, por ejemplo, la abastecen de agua tres cuencas, la cuenca del río Rímac, del río Chillón y del río Lurín. Debido a la contaminación directa que sufren sus aguas, así como las actividades que dañan el ecosistema que permite su flujo, las cuencas están peligrando. Su volumen y la calidad de sus aguas es menor cada vez.
Pero la disminución de este recurso no es solamente en estas zonas. En el resto del Perú y el mundo el agua apta para consumir representa un porcentaje muy pequeño. A pesar de que casi la tercera parte de nuestro planeta esté conformada por agua, aproximadamente un 2.5% del total es agua apta para el consumo.
Aproximadamente, solo en Lima Metropolitana y Callao, se desperdician 120 millones de litros de agua. Es una cifra alarmante dado a que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una persona debe consumir 100 litros de agua al día. Sin embargo, en estas zonas las personas pueden llegar a gastar un aproximado de 160 litros de agua al día.
Si alguna costumbre que tenemos no vela por los intereses de nuestros recursos naturales y mucho menos por los nuestros, entonces no debemos continuar poniéndola en práctica.
Además, debemos tener en cuenta que no somos los únicos posibles afectados, alrededor del mundo existen personas que no tienen acceso al agua potable. Mientras nosotros tenemos hasta para desperdiciarla ¡qué injusto! ¿verdad?
Así que ya sabes ¡no desperdicies agua y no permitas que nadie más lo haga!