Cómo iniciar una conversación en cinco pasos fáciles

Hablar con alguien por primera vez puede dar miedo. Aunque algunas personas tienen facilidad para hacer amigos rápidamente, muchos de nosotros no sabemos por dónde empezar cuando de iniciar una conversación se trata.

En Canal IPe te vamos a dar cinco consejos prácticos para que te atrevas a dar el primer paso.

Empieza por lo fácil

Esto puede salvarte de pasar por situaciones incómodas. Antes de lanzarte a hablar con alguien debes estar atento a su lenguaje corporal. ¿Tiene audífonos? ¿Tiene cara de fastidio o de cansancio? ¿Parece apurado? Si es así entonces deberías intentarlo de nuevo más tarde.

Prueba preguntando

Comenzar con una pregunta es una estrategia universal y casi nunca tiene pierde. Haciendo una pregunta de alguna manera le estás pasando la responsabilidad del diálogo a la otra persona y eso te puede ayudar a calmar, por un momento, los nervios y la ansiedad. 

Ojo. Trata que sean preguntas que lleven a respuestas elaboradas. Las de sí o no no te ayudarán a alargar la conversación.

No seas perfeccionista

Esto parece que se contradice con nuestro primer consejo. Pero no. Casi cualquier lugar es bueno para empezar una conversación. Quedarte esperando al momento o lugar “ideal” para hablarle a una persona solo hará que dejes pasar oportunidades.

Aprende a escuchar

Este es quizás el punto más importante. Si escuchas atentamente lo que quiere decir la otra persona será más fácil que tus respuestas aparezcan de manera espontánea. Un error común es ponerse a pensar en lo que vas a decir en lugar de prestar atención. Esa actitud solo conseguirá que tú y tu interlocutor no lleguen a entenderse. 

Lo básico: no te olvides de hacer contacto visual, asentir de cuando en cuando y hacer comentarios cortos entre cada idea. 

Tolera el fracaso

Sin importar que te memorices estos consejos al derecho y al revés, la verdadera prueba siempre estará ahí afuera. Tienes que tener claro que cuando te decidas a hacerlo, no podrás evitar vivir algunos momentos incómodos en el camino. ¡No dejes que eso te detenga!

Recuerda que con la práctica todos tus temores irán desapareciendo.

¡Comparte estos consejos con alguien que lo necesite!