¿Sufres de ansiedad? Aprende a controlarla con estos consejos

La ansiedad suele aparecer cada vez que nos sentimos amenazados. En el momento menos pensado, antes de hablar en público, al dar un examen importante o luego de pasar mucho tiempo en un lugar lleno de gente.

La lista de situaciones en las que puede visitarnos es igual de larga que los síntomas, que cambian según la persona y el contexto. Pero lo más común es tener taquicardia, sentir que te falta el aire, sudar de forma excesiva, tener problemas para prestar atención y expresar opiniones, sentirte bloqueado e irritable sin razón y perder el control.

Según el Ministerio de Salud, el 7% de peruanos tiene algún tipo de ansiedad. Aunque este sentimiento puede ser útil en algunos casos, si no se controla, puede llegar a perjudicar varios aspectos de tu vida.

Ya sea que te hayas identificado con la descripción anterior o tengas un diagnóstico oficial, estos consejos te ayudarán a manejarla de la mejor forma:

1. Aprende a tener control sobre tus acciones. En otras palabras, a no dejar que tu mente ansiosa controle tu cuerpo. La ansiedad es una sensación desagradable de por sí, pero si le incluimos conductas repetitivas como arrancarse el cabello, darse golpes en la pierna o comer por aburrimiento, las consecuencias serán mucho más negativas. Por eso, para combatirla es importante que reconozcas estos patrones y les pongas freno.

2. No luches para hacer que se vaya. Por mucho que intentes ignorar las sensaciones de tensión y miedo, estas no se van a ir solo porque tu mente consciente así lo quiera. Para que la ansiedad deje de ser un problema, hay que atacar los síntomas creando nuevas pautas de comportamiento.

3. Divide tu día en pequeñas partes. Seguro habrás notado que, a partir de que empiezas a hacer algo que te daba pereza, la situación se vuelve más manejable. Con la ansiedad pasa algo parecido: para alejarte de lo que te produce tensión, lo ideal es empezar una actividad en lugar de solo quedarte pensando en ella.

Para que las tareas complejas se hagan más sencillas, puedes dividirlas en secuencias cortas. Por ejemplo, si tienes que terminar tu tesis, la primera tarea sería prender la computadora y abrir el documento. A partir de ahí continúas con otras acciones pequeñas como escribir un párrafo o buscar nueva bibliografía. Debes ir con calma, un paso a la vez.

4. Tómate tu tiempo. Si bien es importante combatir la procrastinación acabando con los pendientes que te están generando ansiedad, no puedes perder de vista el tiempo que le dedicas a descansar. En este punto no se trata solo de la cantidad sino también de la calidad. Ejercicios de control de la respiración como la meditación o el mindfulness son de gran utilidad para reducir los niveles de estrés y sacar el máximo potencial de nuestros pulmones. Utilizar diez o quince minutos de tu día para practicar un ejercicio tan simple como centrar la atención en el presente ayudará a que pierdas de vista las sensaciones desagradables.

5. Cuídate y muévete. Algo tan sencillo como practicar algún deporte o hacer ejercicio de manera regular, comer sano y tener buena higiene personal hará que no solo te sientas mejor contigo mismo, sino que tu cuerpo aprenda a responder mejor a los momentos de ansiedad.

Si a pesar de estos consejos te sigue costando manejar la situación, tal vez sea hora de agendar una cita con un especialista. Recuerda que no hay salud sin salud mental.