Trenzar: un espacio de creación feminista

Frente a la realidad que coloca a la mujer peruana en una situación de constante vulnerabilidad son necesarios los espacios que promuevan su participación y hagan escuchar su voz desde distintos frentes. Uno de estos frentes es el arte, y una iniciativa feminista que lo está haciendo es Trenzar, una casa cultural ubicada en Barranco que promueve el arte contestatario.

La historia de Trenzar empezó cuando tres amigas Alondra Flores, Mehida Monzón y Micaela Távara conversaban sobre la posibilidad de generar un espacio que les permitiera crear hilando, uniendo y trenzando. En ellas estaba la necesidad de replantear el arte desde una mirada en la que se evidencien los problemas de las mujeres peruanas.

Al preguntarles por el nombre Trenzar, ellas responden que surgió por la necesidad de crear un trenzado colaborativo, una red de saberes y pensamientos diversos.

En su espacio creativo se han erradicado los prejuicios que tanto daño le hacen a las mujeres y a la sociedad. Esto se consigue a través de un espacio horizontal, donde no existen jerarquías. Lo que no solo refleja en sus producciones artísticas feministas, sino también en sus procesos creativos desarrollados de manera colaborativa.

En paralelo a la producción artística, también promueven la LCF (Laboratoria de creación feminista) un espacio libre en que mujeres mayores de 18 años pueden explorar expresiones artísticas. “La laboratoria de creación, es un espacio tanto teórico como práctico pues buscamos que nuestras participantes también aprendan de teoría pero sobre todo que puedan crear a partir de sus propias historias o las de otras y de esa manera generar dispositivos culturales”, comentan las chicas de Trenzar.

Espacios como este son necesarios, ya que a través de su ética de trabajo y propuesta artística feminista visibilizan y denuncian los problemas de la mujer de los que nadie quiere hablar en la sociedad peruana. Para conocer más de su trabajo visita su página de Facebook.