Curiosidades · 10 de Jul 2018
Conoce un poco más sobre los momentos que definieron la poesía del escritor peruano.
Andina / Canal IPe
La historia del escritor y poeta, César Vallejo, llegará pronto a la pantalla grande gracias a la iniciativa de jóvenes cineastas. Momentos difíciles de su vida lo inspiraron a escribir versos admirados por muchos alrededor del mundo.
Algunos hitos de su juventud definieron su estilo taciturno y el rumbo de su poesía. Aquí seleccionamos algunos de esos momentos para recordar a un joven y talentoso Vallejo:
Para pagar sus estudios en la Universidad Nacional de Trujillo, donde estudiaba en la Facultad de Letras, Vallejo trabajó como profesor. Primero lo hizo en el Centro Escolar de Varones N°241 y después en el Colegio Nacional de San Juan. En este último, fue profesor de primaria del escritor peruano Ciro Alegría.
Era 1913 y el poeta tenía 21 años. Su experiencia y trato considerado como docente quedaron registrados en el texto “El César Vallejo que yo conocí”, del libro “Memorias, mucha suerte con harto palo”, de Alegría.
Durante su estadía en Trujillo, formó parte de un grupo de intelectuales de la época llamado Bohemia de Trujillo. De este movimiento literario y artístico salieron personajes reconocidos como el artista plástico Macedonio de la Torre, el músico, Carlos Valderrama e incluso al líder político Víctor Raúl Haya de la Torre.
Aquí también conoció a la poeta María Rosa Sandoval, quien inspiró varios de sus poemas que publicó en diarios y revistas de la época. Años después, Sandoval falleció y su muerte inspiró otros versos que más adelante fueron incluidos en uno de sus libros más conocidos, “Los Heraldos Negros”.
A los 26 años, en 1918, Vallejo viajó a Lima para estudiar un posgrado en la Facultad de Letras de la Universidad Mayor de San Marcos. Durante esta época conoció a reconocidos personajes como José Carlos Mariátegui, Juan Parra del Riego, Luis Alberto Sánchez y Abraham Valdelomar, con quien estableció una amistad cercana.
Ese año, su madre falleció en su natal Santiago de Chuco, ubicado en el norte del Perú. Esta muerte lo llevó a una profunda tristeza que inspiró algunos poemas que luego fueron incluidos en “Trilce”.
Dos años después, Vallejo regresó a Santiago de Chuco y fue acusado de haber robado e incendiado la casa de la familia Santa María Calderón. De manera injusta, el juez envió preso al poeta por 112 días. Se cree que en ese tiempo, fue usado como escarnio para los jóvenes intelectuales comprometidos con la denuncia social.
En estos tiempos difíciles, Vallejo escribió una de sus obras más significativas, “Trilce”, que publicó dos años más tarde. Este poemario se convertiría en una obra vanguardista, que rompió con el modernismo de la época.
Después de la publicación de Trilce (1922) y Escalas melografiadas (1923), Vallejo viajó a Europa sin pensar en regresar alguna vez. Empezó a trabajar para periódicos iberoamericanos como corresponsal en París y Madrid, a donde llegó por primera vez en 1925 con una beca.
Más adelante, Vallejo escribiría numerosos versos, algunos publicados incluso después de su muerte con ayuda de su esposa Georgette Philippart.
Hoy, es reconocido como uno de los escritores más importantes de la historia de la literatura peruana y su trabajo aún es foco de numerosos análisis e investigaciones. ¡Comparte con nosotros alguno de los poemas que más te gustan!