5 razones para sembrar más árboles

El 01 de septiembre se celebra el día del árbol, el cual tiene la finalidad crear conciencia sobre la protección y forestación de nuestras áreas verdes. ¿Sabías que en el Perú el 60% de nuestra superficie está cubierta de bosques?

Existen mil razones por las cuales deberíamos sembrar más árboles, todas igual de importantes. En esta nota te presentamos algunas de ellas.

Combaten el efecto invernadero

El clima del planeta cambia cada vez más rápido, esto debido a gases como el dióxido de carbono que termina en nuestra atmósfera. Estos gases no permiten que el calor sea liberado creando así el “efecto invernadero”.

Los árboles actúan como filtros, ya que absorben casi 22 kg. de dióxido de carbono cada año.  Además almacenan celulosa en su tronco y devuelven oxígeno a la atmósfera. Por otro lado, al brindarnos sombras, los árboles evitan que usemos ciertos artefactos como por ejemplo el aire acondicionado, haciendo posible que se reduzca la  cantidad de combustibles fósiles que se queman para producir electricidad.

Evitan la erosión

Gracias a sus raíces, los árboles mantienen la humedad del suelo. De esa manera, el terreno sobre el cual está plantado se mantiene saludable. Es por ello que se recomienda plantar árboles donde la erosión pueda ser un peligro.

Este problema es más común de lo que se piensa, debido al desgaste por viento, sol y lluvias. En terrenos con poca vegetación, el sol impacta directamente en el suelo, dañándolo. Mientras que cuando llueve intensamente, el terreno queda completamente inundado.

Nos ayudan a respirar

Los árboles son indispensables para hacer respirable la atmósfera, sin ellos, sería imposible poder vivir. Junto con las plantas marinas y otras plantas son responsables de una quinta parte del oxígeno del planeta.

Es por ello que se les conoce como los pulmones del planeta. Solo en un día respiramos entre 5 y 6 litros de aire por minuto, para lo cual es necesario que por cada persona existan 22 árboles.

Previenen la contaminación del agua

Al atrapar el agua de la lluvia, los árboles reducen el escurrimiento. Esto permite que el agua atrapada en sus hojas pueda circular por sus troncos y la tierra donde está enraizado.

De esa manera, lo árboles actúan como una especie de esponja que filtra naturalmente el agua, evitando que los contaminantes llegues a los ríos y posteriormente al océano. 

Reducen el ruido

Uno de los problemas de contaminación que afecta a las grandes ciudades, es la contaminación sonora. Los árboles y las plantas pueden servir como barreras acústicas, lo que permitiría mejorar nuestra calidad de vida.

Por ejemplo, tener árboles cerca a carreteras haría que el ruido producido por el tráfico se reduzca a la mitad, lo que haría que los niveles de ruidos no se consideren peligroso para el ambiente.

Los árboles son necesarios para la existencia de todos los seres vivos. Aprovechemos esta fecha para reflexionar sobre su importancia y contribuyamos a su conservación.