Ayllu Ruwasunchis: oportunidad a través del tejido

Cuando llega el invierno es vital abrigar nuestro cuello con una buena chalina. Y qué mejor si esta cuenta una historia de emprendimiento y ayuda social.

Ayllu Ruwasunchis es una marca social que trabaja con tejedoras de la comunidad de San Pablo Mirador en Manchay. En el proyecto, ellas realizan diversos productos hechos a base de tejidos: chalinas, estuches y fundas para laptops. Las ganancias van destinadas a este grupo de mujeres y a promover su desarrollo personal, familiar y productivo. Asimismo, llevan diversos talleres de habilidades socioemocionales y emprendedoras, con ello se busca que las mujeres se empoderen dentro de su comunidad.

Conversamos con Juan Diego Calisto, socio fundador del proyecto para que nos cuente sobre Ayllu Ruwasunchis. Aquí la entrevista.

¿Hace cuanto trabajas con Ayllu Ruwasunchis?

Venimos trabajando en Ayllu Ruwasunchis hace 4 años. Ayllu nace del Proyecto "Tejiendo Oportunidades" de la ONG Ruwasunchis, que trabaja con mujeres desde hace 7 años. Ruwasunchis también trabaja con niños y jóvenes de la comunidad de Manchay.

¿Cómo surgió la idea?

Como muchas mujeres sabían tejer, decidimos crear Ayllu Ruwasunchis como una empresa social que pueda ayudarlas a tener mejores diseños en sus tejidos y puedan ser comercializados generando ingresos a través del pago de un precio justo.

¿Qué buscas con este proyecto?

Buscamos que tejedoras de Manchay generen ingresos económicos a través del arte que realizan, pagándoles un precio justo en una actividad que también pueden hacer en casa. También, que desarrollen habilidades socioemocionales y emprendedoras. Por otro lado, para el público que compra los productos, es la oportunidad de adquirir un producto de calidad, y que tiene una historia detrás. La posibilidad de generar impacto social usando un producto de calidad.

¿Por qué Manchay? ¿Piensas llevar el proyecto a otras comunidades del Perú?

Por casualidades de la vida llegué a Manchay para hacer voluntariado con un grupo de adultos mayores. Viendo lo grande que era el lugar, y sus necesidades, pedí que me contacten con una comunidad que esté dejada de lado. Así llegué, hace más de 11 años, a San Pablo Mirador, y conversamos con las mujeres y la comunidad para empezar nuestro trabajo. En ese entonces tenía 21 años y tenía la mejor voluntad de ayudar. Luego ya me di cuenta que uno recibe mucho más de lo que da, y todos nos ayudamos.

Queremos consolidarnos en Manchay, incrementar nuestras ventas y luego ya pensar en si crecemos en el mismo Manchay o en otras comunidades. Lo importante es seguir, pues cada año que continuamos, el impacto en la vida de las tejedoras y sus familias es enorme.

¿En qué consiste el trabajo con las tejedoras de Manchay? ¿Cuántas tejedoras son actualmente las que trabajan en este proyecto?

Nuestro proyecto con mujeres busca que ellas mejoren sus habilidades socioemocionales a través de talleres de yoga, coaching, baile, y habilidades emprendedoras a través de talleres de innovación. También busca que logren generar mayores ingresos a través del tejido, y que sepan gestionar mejor sus recursos. Es decir, que sean mujeres empoderadas y emprendedoras. Actualmente trabajamos con 30 mujeres tejedoras de Manchay.

Cuéntanos acerca de los talleres que reciben como parte del programa.

Los talleres son diversos, están los de diseño y producción para mejor sus tejidos, los de yoga que ayudan a las mujeres a sentirse mejor, de expresión corporal que se llama "Desde Nosotras" , otro que se llama "Te quiero verde" sobre agricultura hidropónica, también hay talleres de nutrición y baile. Se realizan todos los fines de semana en Manchay.

Si quieres adquirir algunos de los productos de Ayllu Ruwasunchis, entra a su página. Allí encontrarás los diferentes puntos de venta.