Arte y deporte en nuestras escuelas

¿Hacer deporte es solo un pasatiempo? ¿Practicarlo puede abrirnos puertas a otros mundos? Hace unos días estuvimos en Puente Piedra y conocimos a Cindy y la historia del mejor partido de voley que jugó en su vida.
 

Cindy tenía 12 años cuando llegó a la biblioteca comunal de su barrio en busca de ayuda para mejorar en el colegio. Era muy tímida, le costaba hacer preguntas, no lograba concentrarse y mucho menos rendir buenos exámenes. Trabajó con los maestros de la biblioteca durante varios meses, pero no encontraba el motivo por el cual le costaba tanto rendir en la escuela. Además de mejorar sus notas, Cindy necesitaba trabajar para ayudar a su familia, así que a la profesora de la biblioteca se le ocurrió que, como era tan buena para el volley, podía dirigir el equipo de niñas del barrio y empezar a tener un sueldo por su trabajo como entrenadora. Con el paso del tiempo, Cindy demostró no solo tener grandes capacidades como deportista, sino también como líder del equipo, las chicas la escuchaban y ella sabía cómo alentarlas y organizarlas para ganar cada partido. Cuando Cindy empezó a trabajar y a jugar voley con las niñas, algo en ella cambió; su voz era más fuerte, su voluntad más constante y sus notas en el colegio fueron mejorando hasta lograr uno de los mejores promedios de su promoción.

“Creo que solo me faltaba confiar un poco más en mi y eso no lo hubiera logrado nunca sin el voley y el trabajo con el equipo”.

Unos años después, Cindy se presentó en las convocatorias para pertenecer a la liga juvenil de voley nacional, fue seleccionada, formó parte de la selección oficial y, una vez allí, aprovechó las becas que ofrecen distintas universidades del mundo para los deportistas de nuestro país. Ahora estudia educación física en Estados Unidos y sueña con llevar a la selección peruana de voley al mundial.

En junio de este año, el Ministerio de Educación presentó la nueva versión del Currículo Nacional de la Educación Básica, que entrará en vigencia a partir del 2017 en la mayoría de las escuelas de nuestro país. El documento establece los objetivos de la educación peruana, las cosas que los chicos deben aprender en clases y las habilidades que tienen que desarrollar durante su paso por la escuela. Entre las novedades que presenta el currículo nacional, nos llamó la atención el incremento de horas dedicadas semanalmente al arte y a la educación física; a partir de marzo del próximo año los estudiantes peruanos tendrán 3 horas semanales para explotar su creatividad y ejercitarse en la escuela.

Un incremento necesario

La educación artística sensibiliza a los niños y les permite expresar sus ideas en diversos lenguajes mientras desarrolla su instinto creativo y libera su mente. La educación física, por su parte, abre las puertas a un estilo de vida activo, saludable y ayuda a desarrollar habilidades importantes para la vida. ¿Problemas de comprensión lectora? Se ha demostrado que las clases de música en la escuela ayudan a algunos alumnos a mejorar su concentración, memoria y capacidad de retención. ¿No van bien las matemáticas? ¿Se sienten muy nerviosos antes de dar un examen? Hacer ejercicio cardiovascular (correr, nadar) y descargar la energía haciendo deporte podría ser una buena solución. Practicar ambas disciplinas trae enormes beneficios para la salud mental y física de todas las personas y, en el caso de los niños y los adolescentes, favorece el desarrollo de importantes habilidades emocionales y cognitivas como la lectura o el razonamiento matemático. En las últimas décadas se han publicado diversos estudios que demuestran cómo el arte y el deporte ayudan a los niños a crecer y aprender.

• Mejora el rendimiento académico

  El arte no solo hace que los niños desarrollen su creatividad, sino que también los ayuda a reforzar habilidades necesarias en otras áreas de su vida. La cadena de televisión pública PBS publicó recientemente un informe de Americanos por las Artes donde afirman que los chicos que participan regularmente en actividades artísticas, tienen cuatro veces más probabilidades de ser reconocidos por logros académicos como ferias de ciencias, matemáticas y creación de ensayos o poemas.

• Perseverancia

  El arte y el deporte son espacios donde los chicos se enfrentan a nuevos retos todo el tiempo. Cuando intentan aprender una nueva técnica o disciplina, tendrán que intentar una y otra vez hasta lograr sus objetivos y ser constantes durante el proceso.

• Colaborar y trabajar en equipo

  Muchas de las disciplinas artísticas y deportivas están pensadas para trabajar en equipo. Participando en bandas, coros o practicando deportes grupales, los niños aprenden que su aporte es importante, que tienen que escuchar las ideas de los demás, ser tolerantes y que los objetivos trazados por un grupo de personas son igual de enriquecedores que los que se traza uno mismo.

Acompañando y enseñando

Pero la cosa no es tan fácil y algunos paradigmas deben cambiar para que las horas de arte y educación física sean bien aprovechadas por todos los alumnos. Uno de los principales retos es dejar atrás la visión tradicional del arte como un concurso, del ejercicio como entrenamiento o del deporte solamente como una competencia.

El incremento de las horas de arte y educación física en las escuelas presenta también un reto para los padres, ya que estos tienen la importante tarea de vincularse con la formación artística y el desarrollo físico de sus hijos. Es importante que conversen con ellos sobre los beneficios del arte y del deporte, pero sobre todo es necesario tener en cuenta qué tipo de actividades disfrutan los niños en casa. Para algunos chicos no es fácil desenvolverse en estas disciplinas o han tenido una experiencia negativa en la escuela, es por eso que vale la pena conversar de sus propios objetivos y los retos que pueden superar cada año. Es fundamental que animen a sus hijos a sacarle provecho a estas actividades escolares y que se comprometan a incorporarlas también a la vida de la familia.

Los invitamos a que visiten nuestra página de Facebook y nos cuenten cómo funcionan los cursos de arte y educación física en las escuelas de sus hijos y cómo creen que podrían mejorar.