Padres · 26 de Jun 2020
Estos últimos meses tus hijos se han visto obligados a despedirse de personas que querían mucho. Aprende cómo acompañarlos en este difícil proceso.
Freepik / Canal IPe
La pandemia por COVID-19 se ha llevado muchas vidas y para los chicos esta puede ser una situación muy difícil de afrontar. ¿Cómo comunicarle a un niño o niña que uno de sus seres queridos ha fallecido?
En esta nota de Chicos IPe compartimos contigo estos consejos de UNICEF para que acompañes a tus hijos a afrontar su proceso de duelo y de paso lo hagas tú también.
Si es menor de cinco años, sobre todo, necesita recibir explicaciones claras y sencillas. No es suficiente decirle que su abuelo se fue lejos, es mejor que le digas, con mucho cariño y tacto, cosas como: “Tu abuelito ha muerto. Eso significa que no lo veremos más”. Aunque decirles esto pueda sonar duro, será mucho peor si usamos palabras que los confundan.
Es común que los niños pequeños retrocedan en sus avances como una forma lidiar con el dolor. Ejemplos: volver a chuparse el dedo o a orinarse en la cama. Si esto pasa, no lo juzgues ni lo regañes, respeta su dolor y acompáñalo.
No está mal que te muestres triste o afligido. Así le estarás enseñando que está bien expresar sus emociones en el momento adecuado. Pero si en algún punto sientes que el dolor te desborda, es mejor que trates de recomponerte en privado. ¡No queremos asustarlo!
Es importante que observes cómo está sobrellevando la situación para saber si tienes de qué preocuparte o no. Si ves que cada vez le importa menos su cuidado personal, deja de bañarse, pierde el apetito, se vuelve retraído o demasiado irritable, podría estar deprimido.
La American Cancer Society recomienda una opción interesante para afrontar el duelo. Cuando tú y tu hijo se encuentren más estables emocionalmente pueden optar por hacer algo creativo en familia como plantar un árbol (que representa una nueva vida), escribirle una carta a esa persona que ya no está o comenzar un diario.
Otra idea, que requiere un poco más de tiempo, es honrar la memoria de la persona fallecida participando en una causa o actividad que disfrutaba como algún proyecto social de ayuda a los animales.
Recuerda: el proceso lleva tiempo. Tómenlo con calma y busquen ayuda si lo necesitan. Un profesional de la salud mental los ayudará a transitar por este camino de una mejor manera.