Estas eran las muñecas y accesorios más populares de todos

Los papás de hoy, y posiblemente sus papás, se divertían con unos dibujos muy curiosos, muñecas y muñecos de papel recortables. Si no contaban con una muñeca convencional, estos “juguetes” eran el reemplazo perfecto, ya que también se les podía vestir e incluir accesorios. ¡Sí, así como los que tenemos hoy! 

¿Qué son las muñecas y muñecos de papel?

Estos juguetes, que antiguamente eran muy populares, son dibujos de personas, prendas de vestir y accesorios hechos en papel. Estos eran recortados y se unían, convirtiéndose en muñecas y muñecos ideales para jugar. 

Los juguetes no aparecieron de la nada. Estos tuvieron su origen en el siglo XVIII como herramienta que los sastres parisinos utilizaban para mostrar a sus clientas cómo les quedarían los vestidos. Así, esas muñecas lucían como señoras adineradas de aquel entonces.

Con el avance de la imprenta muchas editoriales y artistas crearon tanto muñecas como muñecos, ya que en sus inicios se podía observar los dibujos de mujeres y niñas. Además, se le incluyó diversas prendas y accesorios que se podían colocar y quitar según lo que se quería que nuestro personaje use.

También, conforme avanzaba el tiempo y aparecían nuevos íconos populares, se creaban recortables de ellos. Así que los fanáticos de cantantes o artistas podían tener en papel a la estrella que más admiraban.

¡Sí que fueron populares las muñecas y muñecos de papel!

Recortables del Qhapaq Ñan Perú

Hoy, para que los pequeños puedan jugar como muchos lo hacíamos y aprender más sobre nuestra cultura, el Qhapaq Ñan Perú ha publicado en su cuenta de Facebook unos recortables que nos van a fascinar. Se trata de dibujos que contienen las prendas de nuestras danzas típicas. 

Uno de los recortables nos muestra la vestimenta de la danza de pallas del distrito de La Unión en Huánuco. 

Otro recortable nos muestra la vestimenta del danzante de Los Negritos del distrito de Huaytará en Huancavelica.

Es interesante aprender de aquellos juguetes con los que jugaban los papás ¿verdad? ¡Hagamos uno propio!