Si un niño es sonámbulo, no lo levantes

¿Has visto a tus pequeños levantarse de la cama y caminar dormidos por toda la casa? ¿Es un fenómeno común en ellos? Mientras descansan, los niños pueden padecer diversos trastornos. Las más usuales son las pesadillas, hablar somnolientos, el síndrome de las piernas inquietas o el sonambulismo. 

Este último es muy común durante la infancia y, por lo general, termina desapareciendo con el tiempo. Sin embargo, a veces los padres no saben cómo asistir o actuar frente a un menor que tiene esta perturbación en el sueño. A pesar de que los adultos saben que se trata de una alteración, se asustan y pierden el control de la situación. Para despertarlos suelen aplicar populares mitos como zamaquearlos, levantarlos abruptamente o llamándolos por otro nombre, pero ¿realmente funciona?

Para la psicóloga Heydi Villacrez, se desconocen las causas que producen el sonambulismo, pero se asocian a situaciones traumáticas, estrés, cambios de hábitos de sueño e incluso puede ser hereditario. Este fenómeno puede manifestarse a partir de los 3 años y durar hasta los 12 aproximadamente. Luego el descanso se va regulando. Eso sí, debemos estar atentos si este trastorno continúa extendiéndose hasta que son adolescentes ya que, si no se trata a tiempo con un especialista, podría arrastrarlo hasta que sean adultos. 

“Es importante contar con profesionales de varias disciplinas para descubrir las causas del sonambulismo en un niño. Se necesita el trabajo en equipo entre el pediatra, neurólogo y psiquiatra para mejorar la calidad de sueño del menor, porque este problema al igual que el insomnio, no permite que descansen adecuadamente. Cuando un niño no duerme bien se pone más irritable, está más cansado y se altera la hormona del crecimiento”, comenta Heydi.

Hay que tener en cuenta que el sonambulismo puede ocurrir en las primeras horas de sueño o durante el sueño profundo. También debes de saber que no todos los sonámbulos se levantan y caminan por toda la casa, algunos de ellos se ponen a llorar. Otros suelen sentarse en la cama y actúan como si estuvieran despiertos cuando, en el fondo, ¡están dormidos!

¿Qué pueden hacer los padres?

De acuerdo con la especialista, si los padres ya saben que tienen un hijo sonámbulo lo primero que deben hacer es preparar el ambiente para que no sufran ningún tipo de accidente cuando caminan dormidos y aturdidos. Otro consejo es no levantarlos de un momento a otro ya que puedes asustar al pequeño y provocarle taquicardia.

“Si despertamos con un grito a un niño en ese estado lo vamos a alterar y producirle un shock emocional. El menor se va a desorientar porque para ellos continúan durmiendo y no son conscientes de que están caminando. Lo ideal es que los adultos mantengan la calma y direccionen nuevamente a su hijo a la cama. Si te conversa, háblale con total normalidad y acompáñalo. Nosotros como personas mayores somos correguladores de las emociones de los pequeños y debemos actuar con sensatez”, explica la psicóloga. 

Otras recomendaciones que nos da la experta para regular el sonambulismo es que los niños tengan una rutina de previa de sueño, desde el momento en que se ponen el pijama. Esta debe de ser a la misma hora todos los días. También aconseja no darles dispositivos electrónicos, ni dulces antes de dormir porque los estimula a estar despiertos.

Si les hablas antes de acostarlos, baja tu tono de voz y reduce todo tipo de ruidos. Evita que cenen tarde y trata de darle infusiones. Asimismo, no te olvides de hacerlos miccionar para que no interrumpan su descanso durante en la madrugada.

Si tu pequeño tiene sonambulismo recuerda aplicar estos consejos para no asustarlo, al contrario, debes acompañarlo en esos momentos. Comparte esta útil información en tus redes sociales con tus familiares y amigos.